La importancia de saber que tu embrión es sano

13 slideMuchas parejas nos preguntan “¿podemos saber si el embrión está bien antes de ponérmelo?” Claro que sí, es lo bueno de los avances científicos, que cada vez podemos conocer más cosas. ¿Cómo lo hacemos? Pues es… relativamente sencillo.

Lo primero y más importante es conocer exactamente qué alteración genética vamos a buscar en los embriones. La mayoría de las veces se trata de buscar desórdenes genéticos a nivel de cromosomas (lo que llamamos aneuploidías) como la existencia de un número de cromosomas de más o de menos, trocitos de ellos que cambian de posición, o incluso resultados caóticos que reflejan alteraciones más complejas. Técnicamente lo llamamos diagnóstico genético preimplantacional para screening de aneuploidías (DGP).

Con ello evitamos fallos de implantación o abortos tempranos; incluso con la detección de algunas alteraciones concretas, podemos detectar qué embriones tienen enfermedades como el síndrome de Down, el síndrome de Edwards o el síndrome de Patau.

Pero hoy en día también podemos detectar las llamadas enfermedades monogénicas, es decir aquellas que afectan a uno o un grupo de genes concretos. Esta nueva técnica ha sido de gran ayuda a muchas parejas portadoras de enfermedades recesivas que sin hacer este DGP tendrían unas altas probabilidades de que sus hijos nacieran con enfermedades muy graves.

A nivel de laboratorio la metodología es la misma para las dos. Se realiza un ciclo de fecundación in vitro, se fertilizan los óvulos mediante ICSI y se busca el mejor momento en el desarrollo embrionario para biopsiar cada embrión. Debemos hacer un agujero y acceder al interior del embrión, de donde debemos sacar una o varias células sin perjudicar al resto. Es un proceso muy delicado para el que no todos los embriólogos están autorizados. Requiere de una formación muy específica con la que sí cuentan nuestros embriólogos.

Esas células obtenidas se envían a un laboratorio de genética acreditado para este tipo de análisis y en el informe que se recibe nos indican qué embriones son sanos genéticamente. ¡Genial! Ya tenemos transferencia.

El resto es igual que para una transferencia de embriones habitual, con la diferencia de que ahora sabes que tu embrión es sano.

Estos tratamientos tienen un precio elevado ya que hay que tener en cuenta el material adicional utilizado, la formación específica del embriólogo y el análisis genético de los embriones. Pero en la Clínica ERGO queremos ayudaros; por eso contamos con la opción de financiar los tratamientos hasta en 12 meses sin ningún gasto para vosotros ya que esos gastos financieros los asumimos nosotros.

Conoce a nuestro personal, nuestra disponibilidad y las opciones económicas que podemos ofrecerte para que tu embrión también sea sano. Ponte en las mejores manos.