Nos hemos contenido… hemos querido esperar a superar la ecografía de semana 20, a que todos los datos clínicos estuvieran bien y ahora sí, ahora podemos contaros con toda la ilusión del mundo, que la primera transferencia de EMBRACE que hemos hecho en la Clínica ERGO, trae en camino una niña.
Siempre que implementamos una técnica nueva, es la ilusión por mejorar lo que nos mueve a hacerlo. EMBRACE era un objetivo, poder analizar los cromosomas de los embriones sin necesidad de biopsiarlos suponía un avance científico y técnico abismal. Poner EMBRACE a disposición de los pacientes no fue fácil; para poder realizarlo, nuestra clínica tuve que pasar una estricta auditoría donde se comprobaron varios parámetros. Entre ellos, las certificaciones nacionales y europeas de nuestros embriólogos, los excelentes resultados de llegada a blastocisto, de tasa de embarazo y de calidad técnica en el laboratorio. Pero eso fue solo el principio.
El proceso de validación requirió un elevado número de casos donde demostrar no solo la calidad de los embriones sino la concordancia entre el resultado de la biopsia y el resultado del análisis de la gota. Fue una gran alegría haberlo superado a la primera, y así nos convertimos en la segunda clínica del mundo en contar con la acreditación para realizar EMBRACE.
A partir de ese momento, comenzamos a ofrecerlo a aquellos pacientes que dadas sus circunstancias clínicas o antecedentes reproductivos, podían beneficiarse de esta nueva técnica. El primer caso fue el de Almudena y Damián; 2 abortos previos y muchos miedos. Hicimos el ciclo FIV, conseguimos 11 blastos de excelente calidad y el EMBRACE nos identificó 6 para transferencia.
Los miedos se tradujeron entonces en el momento de la transferencia. Una preparación endometrial muy cuidada, con mucho cariño, con todos los parámetros controlados, y una transferencia embrionaria en un ambiente muy tranquilo.
El día de la prueba de embarazo fue si cabe aún más especial. Principios de octubre, todos pendientes de la pantalla de nuestro equipo de análisis, y por fin el resultado: beta positiva de 2682. ¡Felices, primer caso de Embrace, primera transferencia, y embarazo positivo! Un pasito más dado. La ecografía en semana 7 de gestación nos indicó que todo iba bien, con la fuerza de su latido fetal y su saquito bien colocado.
Seguimos avanzando, el test prenatal no invasivo en semana 10 nos confirmó que tenía 46 cromosomas, que todo estaba bien! Y como información adicional, que es una niña.
Ahora ya, embarazada de 21 semanas, Almudena nos cuenta que todo sigue perfectamente, que las medidas ecográficas de semana 20 han salido perfectas y que ella se encuentra muy bien.
Ha sido un caso muy bonito, una pareja encantadora con la que ha sido muy fácil trabajar y a la que agradecemos habernos dejado participar en la llegada de Sofía, nuestro primer caso de EMBRACE y que quizás se convierta en el primer nacido a nivel mundial.